VACACIONES Y PEQUES
Como estructurar un verano de familia y diversión
Estamos a las puertas del verano y ello conlleva el fin de las clases, cambio de rutinas, distintos horarios y sobre todo más tiempo libre y diversión. En estos meses nos surgen dudas sobre cómo distribuir el tiempo con los más peques y cómo organizarnos el día.
Nuestros peques por lo general están acostumbrados a tener mucha actividad a lo largo del día: colegio, extraescolares, deberes etc. El contraste con días más calmados y sin tantas obligaciones puede desencadenar en comentarios constantes de que están aburridos, acabar enganchándose con actividades que les gustan mucho pero que no son saludables en exceso “mucho tiempo de pantallas” o mostrar un exceso de energía que no se ha liberado por no realizar tanta actividad como estaban acostumbrados.
Por todo ello, es importante en la medida de lo posible tener en cuenta una serie de tips para que el verano pueda resultar lo más agradable posible para todos:
- Intentar mantener una rutina flexible: Aunque vayamos con mas calma es saludable para todos mantener una estructura en los días de verano, dedicar un espacio diario a hacer alguna tarea de casa, tiempo de ocio (juegos, manualidades, puzles), tiempo para salir y para descansar. Esta estructura es flexible y puede modificarse, pero el intentar mantenerla ayuda a los mas peques a organizarse.
- Tiempo limitado de pantallas: Una de las actividades que resultan más atractivas para los peques es el uso de pantallas, ver televisión, ver videos en YouTube o jugar con la Tablet, móvil o consolas. Es natural que aumentemos el tiempo de uso, aun así, es adecuado poner límites, ya que un tiempo excesivo de pantallas resulta perjudicial. Se puede acordar un tiempo por la mañana y otro por la tarde. En el caso de los niños con más edad se puede proponer el tiempo de uso de las pantallas después de haber realizado alguna tarea en casa, a modo de refuerzo.
- Promover las actividades al aire libre: El contacto con la naturaleza y realizar deporte al aire libre son opciones saludables. Dar un paseo a última hora del día por el parque, hacer una ruta fácil y corta, ir a la piscina etc. Además estas actividades proporcionan una liberación de energía para descansar mejor por las noches.
- Socializar: Al pasar más tiempo en el parque o en las urbanizaciones se fomenta la socialización. Conocer a nuevos amigos o realizar deporte con nuevos compañeros ayuda a promover las habilidades sociales, la autoestima y la asertividad.
- Tiempo diario de lectura: Aunque las tareas pueden variar según la edad, es esencial intentar fijar un tiempo diario de lectura. Con los más peques nosotros les podemos acompañar en ese espacio leyéndoles un cuento. En cambio, para los niños que ya se encuentren en primaria existen distintos comics y libros sobre temáticas para su edad que pueden resultar muy atractivos.
- Aprovechar para hacer actividades en familia: También es tiempo de aprovechar para poder hacer todo lo que no hacemos el resto del año, actividades conjuntas en familia. Desde hacer un mural de pintura familiar, ir a la piscina o visitar un pueblo o paraje nuevo. Este tiempo juntos refuerza los lazos familiares y es tiempo de calidad.
- Trabajar la responsabilidad en los peques: Al disponer de mas tiempo para enseñarles, es un buen momento para que aprendan tareas nuevas relacionadas con el hogar y la autonomía. Aunque estas responsabilidades cambian según la edad, pueden empezar a aprender a hacer la cama, a recoger la mesa, cuidado de las plantas, a vestirse solos o incluso ser ayudantes de cocina con papá o mamá.
- El aburrimiento no es malo: Es sano que tengan tiempo para jugar o crear nuevas formas de diversión. El aburrimiento es un espacio que fomenta la creatividad y la búsqueda de alternativas promoviendo la autonomía e independencia. Por lo tanto, no es necesario que tengan durante todo el día actividades que hacer, es saludable dejar espacios vacíos.
- Divertirse: Por supuesto la magia de las vacaciones es la diversión y el disfrute. Aunque intentemos tener una estructura o rutina no hay prisas ni estrés y podemos dedicar el tiempo a realizar actividades agradables con las que nuestros hijos disfrutan. El mejor de los propósitos del verano es pasarlo bien y poderlo compartir con nuestros peques.
Junio 2021
Esmeralda Rosell Medel
Psicóloga Sanitaria Infantil
Centro de Psicología AtienzaBoada