LA GESTIÓN EMOCIONAL CON LOS NIÑOS Y LA COVID-19
Cómo podemos gestionar las emociones de los más pequeños
El conjunto de cambios que estamos experimentando desde que llegó el coronavirus a nuestra sociedad (rutinas nuevas, diferente forma de estudiar y hacer los deberes, medidas de higiene o no ver a la familia y amigos) tienen una serie de efectos en las personas. En el caso de los adultos, podemos expresar y ponerle palabras a cómo nos sentimos para gestionar dichas emociones o pedir ayuda si es necesario, pero ¿qué ocurre con los más pequeños? ¿cómo expresan su malestar y qué podemos hacer?
Durante estas semanas es probable que los niños y niñas se muestren preocupados por lo que está ocurriendo y es habitual que lo expresen de las siguientes formas: pueden mostrarse más irritables, experimentar miedos, llorar con mayor facilidad, preocuparse en exceso por el contagio, reclamar atención constante, o incluso, pueden tener estallidos de ira. Todos estos comportamientos son la forma que tienen de expresar tristeza, miedo, ansiedad o enfado por lo que está ocurriendo. Al no saber comunicar sus emociones de forma adecuada (porque previamente no saben identificar lo que están sintiendo) es más probable que dicho malestar se transmita a través de estas vías menos óptimas.
Es importante saber manejar estas situaciones para que puedan expresar cómo se sienten y aprendan a gestionarlo. Para ello es recomendable tener en cuenta una serie de pautas:
- Validar sus emociones: los niños y niñas al igual que los adultos en esta situación están tristes y enfadados. Debemos dejarles su espacio para expresarlo y no regañarles ni culpabilizarles por sentirse así.
- Poner nombre a sus emociones: Para poder gestionar una emoción primero hay que identificarla. Esto varía en función de la edad. Para los niños de infantil es más sencillo disponer de algún recurso material como tarjetas de caritas o dibujos para que las puedan utilizar cuando lo necesiten e identificar así cómo se sienten. Según va avanzando la edad se van aumentando el número de emociones disponibles.
- Gestionar: Se pueden utilizar según la edad varias técnicas que pueden relajarles como una canción que les calme, leer un libro, abrazarles, saltar o hacer actividad física para liberar energía, hacer respiraciones o relajación.
- Informar: Es posible que por querer proteger a los niños no contestemos sus preguntas sobre lo que está ocurriendo y les ocultemos información. Esto puede desencadenar en que no entiendan bien la situación, se sientan confusos o incluso se frustren. Es importante proporcionarles una información adaptada a su edad sobre la situación, la cuarentena, el coronavirus o las salidas a la calle cuando sea posible.
- Normalizar la expresión emocional en casa: habituarse a hablar de las emociones. Las madres, padres o cuidadores de los menores son sus referentes y modelos. Por ello, si observan que los adultos también se enfadan, se preocupan o lloran les va a ser más sencillo expresarlo con naturalidad. Se pueden utilizar libros de emociones, videos, canciones o simplemente el juego.
Todas estas pautas potencian una mejor gestión emocional. La aceptación de las emociones es el primer paso para poder avanzar en estos procesos ya que la situación actual produce malestar y tenemos que aprender a lidiar con ello. El trabajo de las emociones con los más pequeños es fundamental ya que potencia la percepción de control de uno mismo y su autoestima. Por todo ello, es importante que si se observamos dificultades en los niños en la gestión emocional se trabaje en ello.
Abril 2020
Esmeralda Rosell Medel
Psicóloga sanitaria infanto-juvenil
Centro AtienzaBoada de Psicología