LA INFIDELIDAD DESDE DENTRO

¿Qué hacer ante una infidelidad en la pareja?

 

¿QUÉ ES? TIPOS DE INFIDELIDAD

Uno de los pilares fundamentales de una relación sana es la confianza entre sus miembros. Cuando formamos una relación, establecemos unas reglas implícitas, un pacto entre nosotros.

Hay muchos tipos de relaciones (abiertas, poliamorosas…), pero nos vamos a centrar en las relaciones tradicionales en las que una de las reglas implícitas consiste en que la relación no esté abierta a otras personas. Para este tipo de relaciones, la infidelidad supone una ruptura de dicho pacto, una brecha que puede suponer que ese pilar se tambalee o derrumbe.

Hay muchos tipos de infidelidad. Algunos de ellos son:

  • Directa: es la planificada, es decir, la persona ya tiene en mente engañar a su pareja y actúa en esa dirección. Por ejemplo: cuando una persona se registra en aplicaciones para “ligar” con otras personas.
  • Indirecta: la persona no tiene intención ni planifica la infidelidad, sino que ésta surge. Por ejemplo: cuando te encuentras mal en tu relación, te apoyas en otra persona y un día surge esa cercanía con un/a tercero/a.
  • Online o virtual: personas que utilizan las tecnologías para “conocer” a otras personas. No necesariamente tiene que haber un encuentro físico con ellas. Por ejemplo, el sexting (intercambio de fotos o de contenido erótico) o el cibersexo, son formas de cometer dicha infidelidad.
  • Física: es la opuesta a la online ya que en este tipo de infidelidad si hay contacto físico con la otra persona. Es de la más frecuentes.
  • Afectiva: se lleva a cabo tras la necesidad de cubrir una parte más emocional y no necesariamente incluye sexo. Es aquella en la que “se siente algo” por la otra persona. Este tipo de infidelidad suele llevar a muchas dudas por parte de la persona que la comete.
  • Sexual: en ella se lleva a cabo el acto sexual sin experimentar un profundo apego emocional necesariamente.

 

¿QUÉ HACER SI NUESTRA PAREJA NOS HA SIDO INFIEL?

Cuando sufrimos una infidelidad pasamos por un momento muy amargo en la vida ya que no sólo se tambalea la relación de pareja sino también nuestro bienestar psicológico, autoestima y todos los planes y expectativas depositados en la relación. Comienzan a invadirnos pensamientos acerca de porqué nos ha pasado esto, de qué he hecho mal, de si no soy suficiente para esa persona, de cuántas veces ha podido engañarme… Por todo ello, es importante protegernos: 

  • Busca apoyo. Es un momento doloroso para ti en el que sientes muchas emociones revueltas y es bueno poderte apoyar, compartiendo tu dolor con personas de confianza y haciendo con ellas actividades gratificantes en las que también puedas desconectar. Es importante elegir esas personas de confianza, así como tener momentos en los que poder hablar del tema sin que se convierta en el único tema de conversación.
  • Concédete tiempo. Cuando pasas por este proceso no sabes qué hacer ya que los sentimientos son contradictorios. No sabes si dejar a tu pareja, si escucharle o no, si marcharte de casa… Date tiempo para permitirte procesar lo que ha ocurrido para poder tomar una decisión.
  • Intenta no compararte con la persona con el/la que te ha sido infiel. En estos momentos nos preguntamos el por qué, y la respuesta suele llevar a desvalorizarnos: “¿qué tendrá él/ella que no tenga yo?”, “¿será más atractivo/a?”, … Nuestro valor no cambia por este hecho.  
  • Si decides hablar con tu pareja, pregunta todo lo que necesites saber. Esto no bastará, pero puede ayudar a no aumentar el malestar. Es importante que en esa conversación expreses lo que necesites y diferencies si la información que quieres obtener es porque quieres trabajar la confianza o es por la curiosidad y no te va a resultar útil porque te va a hacer daño y se va a convertir en algo obsesivo.

La infidelidad supone un punto de inflexión que nos hace conscientes de que algo en nuestra relación no funciona. Es un momento en el que la realidad nos golpea de frente y, aunque es un proceso doloroso, es importante que entendamos lo que ha ocurrido en nuestra relación porque eso nos puede dar la oportunidad de poder subsanarlo si ambos tenemos el deseo de reparar. Para ello, podemos recurrir a profesionales que nos guíen y ayuden en ese camino. En otras ocasiones, tenemos claro que son límites que no estamos dispuestos a tolerar y deseamos centrarnos en recuperarnos del impacto en nuestro bienestar psicológico. Sea la decisión que desees tomar ante una cosa así, es importante que no te olvides en este proceso y cuides y repares la herida provocada para poder continuar con tu bienestar ya sea por ti o por tu relación también.

 

Febrero 2021

Cristina González Díaz

Psicóloga Sanitaria

Psicóloga Sanitaria Experta en Trastornos Alimenticios

AtienzaBoada Centro de Psicología

 

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AtienzaBoada Centro de Psícología