Procesos cognitivos

¿Qué evaluamos y por qué importa?

En nuestro centro, evaluamos distintas funciones cognitivas que influyen directamente en cómo pensamos, aprendemos, recordamos y actuamos en el día a día. Aquí te explicamos cada una con ejemplos sencillos:

Habilidades Cognitivas Generales

  • Comprensión verbal: capacidad para entender y usar el lenguaje.
    Ejemplo: Seguir instrucciones como “ponte los zapatos y coge la mochila”.
  • Razonamiento perceptual: habilidad para interpretar y organizar la información visual.
    Ejemplo: Armar un mueble siguiendo un dibujo o plano.
  • Memoria de trabajo: retener información mientras se realiza una tarea.
    Ejemplo: Recordar un número de teléfono mientras lo marcas.
  • Velocidad de procesamiento: rapidez con la que se entiende y responde a la información.
    Ejemplo: Resolver operaciones matemáticas simples bajo presión de tiempo.
  • Coeficiente Intelectual Total (CI): refleja el rendimiento global en distintas áreas cognitivas.
    Ejemplo: No es una tarea concreta, pero puede influir en cómo se resuelven problemas nuevos o se aprende en general.

Habilidades Cognitivas Específicas

  • Lectura: capacidad para decodificar y comprender textos.
    Ejemplo: Leer una receta y seguir los pasos correctamente.
  • Escritura: habilidad para expresar ideas por escrito de forma clara.
    Ejemplo: Redactar un correo electrónico o escribir una lista de la compra.

Procesos de Atención

  • Atención sostenida: mantener la concentración durante un periodo de tiempo prolongado.
    Ejemplo: Escuchar una clase sin distraerse o ser capaz de ver una película sin perder el hilo.
  • Atención dividida: atender a dos tareas al mismo tiempo.
    Ejemplo: Cocinar mientras se habla por teléfono.
  • Atención selectiva: focalizarse en lo importante y filtrar distracciones.
    Ejemplo: Leer en una cafetería ruidosa sin perder el hilo.
  • Atención alternante: cambiar el foco entre tareas distintas.
    Ejemplo: Pasar de responder correos a atender a un programa de televisión y volver a seguir contestando correos

Memoria

ALa memoria es la capacidad del cerebro para registrar, conservar y recuperar información y experiencias a lo largo del tiempo.

No es un solo proceso, sino un conjunto de sistemas que trabajan en distintas etapas: percibimos un estímulo, lo codificamos, lo almacenamos y luego lo evocamos cuando lo necesitamos.

La memoria nos permite dar continuidad a nuestra identidad, aprender del pasado y adaptarnos al presente.

  • Corto plazo: Recordar un nombre que te acaban de decir de alguien que acabas de conocer
    • Memoria de trabajo: recordar un número de teléfono que te acaban de decir.
  • Largo plazo: Recuerdos que se mantienen en el tiempo, como la infancia o recuerdos de la juventud.
    • Semántica. Conocimientos de cultura general. Saber que la capital de España es Madrid.
    • Episódica. Recordar momentos concretos como si fueran vídeos. Recordar un día de pequeño en la playa.
    • Procedimental. Procesos no verbales. Recordar cómo montar en bicicleta, aunque hayan pasado años sin practicar.

Funciones ejecutivas

Procesos que regulan la conducta y la toma de decisiones.

  • Toma de decisiones: Decidir dejar de ver una serie para acostarte porque sabes que mañana madrugas.
  • Planificación: Organizar qué tienes que comprar cuando vayas al supermercado y en qué orden recorrerás los pasillos para ahorrar tiempo.
  • Inhibición: Estás en una reunión y alguien hace un comentario que te molesta, pero en lugar de gritar o responder de forma impulsiva, respiras, piensas y respondes de manera calmada y adecuada.

Ver un pastel delicioso en la mesa y resistirte a comerlo de inmediato porque recuerdas que todavía no es la hora del postre.

Lenguaje

  • Afasia: es un trastorno del lenguaje que afecta la capacidad de comprender, hablar, leer o escribir
    • Producción. Saber que quiere decir la palabra “mesa” y no ser capaz de encontrar todos los movimientos de la boca para decirla.
    • Comprensión. Ser capaz de decir la palabra mesa pero no entender su significado.
  • Alexia: Incapacidad para la lectura. Una persona ve un cartel escrito, pero no puede comprender las palabras.
  • Agrafia: Incapacidad para la escritura. Al intentar escribir “casa”, la persona pone letras desordenadas como “sac”.

Otras Habilidades Evaluadas

  • Habilidades académicas Conocimientos adquiridos en lectura, escritura y cálculo. Ejemplo: Resolver problemas matemáticos o comprender textos escolares.
  • Habilidades no verbales Procesamiento de información sin lenguaje. Ejemplo: Interpretar gestos, reconocer expresiones faciales o entender mapas.
  • Habilidades visoconstructivas Capacidad para organizar elementos visuales en el espacio. Ejemplo: Dibujar una figura geométrica o copiar un dibujo.
  • Praxias. Movimientos coordinados y voluntarios aprendidos: Atarse los cordones de los zapatos de manera automática.
  • Gnosias. Reconocimiento sensorial.
    • Visual: Reconocer a un amigo a distancia al ver su cara.
    • Auditiva: Identificar la voz de tu madre por teléfono.
    • Táctil: Con los ojos cerrados, distinguir que tienes una moneda en la mano solo al tocarla.
    • Gusto-Olfato: Probar una comida y reconocer que tiene sabor a canela.
solicita cita previa
AtienzaBoada Centro de Psícología